Jairo Lozano.

Jairo

Hace ya casi 8 años un joven entró en mi clase.
Tocaba un poco la guitarra, decía, y quería prepararse para entrar en el Conservatorio.
Había aprendido a tocar “Asturias”, “Romance Anónimo” y “Recuerdos de la Alhambra”… él solo, sin apenas conocimientos musicales.
Me pareció impresionante.
Se sentía inseguro y su mayor ilusión era poder aprender a dominar el instrumento que le apasionaba , la guitarra.
Fue para mi, un alumno brillante, especial.
Siempre preocupado en mejorar, en superar todos los obstáculos e inseguridades de alguien que es siempre muy exigente consigo mismo y que está dispuesto a todo para conseguir lo que desea.
No me sorprendió que progresara rápidamente, Jairo había nacido para ser guitarrista y finalizó sus estudios en el Conservatorio con la máxima calificación.
Fue también muy importante en los primeros pasos de nuestra orquesta Ensemble XXI, con él vivimos momentos muy emocionantes.
Jairo siempre creaba un ambiente especial.
Es una persona transparente, sensible, espontanea, y los que le conocemos sabemos que mirarle a los ojos es ver directamente su corazón.
Continuó sus estudios en el Conservatorio Superior de San Sebastian con Marco Socías y, ahora está finalizándolos en Sevilla con Antonio Duro.
El pasado 22 de noviembre, día de Santa Cecilia, estuvo en el Conservatorio de Monzón interpretando el Concierto de Aranjuez de una manera profunda y brillante.
Él explicó al público que empezó a tocar la guitarra para algún día poder tocar esa obra y que su sueño se había cumplido.
Sentado entre el público me sentí afortunado de haberlo conocido y de haberle ayudado como profesor, un poco, a conseguir su sueño.
La trayectoria de Jairo Lozano es un ejemplo más de que cuando alguien desea algo de verdad, con toda el alma, lo consigue.
Enhorabuena Jairo, los que te queremos deseamos que continúes cumpliendo todos tus sueños.
José Antonio Chic